
En todo deporte de contacto hay un día en el que el deportista novel se debe enfrentar con la realidad, poner en práctica lo aprendido y afrontar, por fin, su primer combate. Es lo que en el mundillo se conoce por “hacer guantes” o “echar unos guantes”. Llegará ese momento en que el entrenador habrá decidido que ya está preparado y que es la hora.
Es entonces cuando ganan más relevancia que nunca las protecciones. Son esos primeros combates de entrenamiento cuando las protecciones son más importantes porque, por muy preparados que nos sintamos, aún no tenemos la seguridad que nos creemos tener, y más vale estar preparados.
No importa que disciplina deportiva practiquemos. Sea karate, MMA, boxeo… En cualquier deporte de contacto las protecciones son básicas: cascos, espinilleras, guantes, vendas, petos, coquillas. Cada deporte tiene sus exigencias y sus necesidades. Pero si algo tienen en común todos ellos es la necesidad de utilizar un protector bucal. El clásico protector bucal de boxeo.
Tipos de Protectores Bucales de Boxeo
No es necesario que hagamos hincapié en las evidentes ventajas de utilizar protectores bucales de boxeo. Pero lo que sí merece la pena destacar, sobre todo para el deportista novato es que existen tres clases de protector bucal, atendiendo a su calidad:
Protectores bucales a medida: Son los protectores más caros y, por supuesto, los que ofrecen el mejor agarre, son más cómodos y dan la mayor protección al deportista. Como es evidente, se hacen por encargo en la consulta de un dentista haciendo un molde con la dentadura de la persona que va a llevarlo.
Protectores bucales a medida: Es la clase de protector más utilizado, y el preferido de los profesionales ya que dan un excelente agarre, su ajuste es perfecto y su precio mucho más razonable que el de los protectores a medida.
Protectores bucales comunes: Es la opción más económica, pero tienen el hándicap de que al venir pre-moldeados no se pueden adaptar tan bien a la boca del deportista.
¿Cómo moldear el protector Bucal de Boxeo?
Como comentábamos antes, el protector bucal de boxeo más utilizado es el moldeable. Pero muchas veces, para el deportista novel puede ser un problema la primera vez que se encuentra ante la situación de moldear su primer protector. Tan solo debe seguir esta pequeña guía:
- Reúne los materiales necesarios. Necesitarás los siguientes elementos: el protector bucal, unas tijeras, una olla con suficiente agua hirviendo donde sumergir el protector, un tazón con agua helada, una cuchara y una toalla.
- Empieza por recortar tu protector a la medida apropiada. Para ello métete la pieza en la boca para comprobar que los extremos no lastimen la parte posterior de tu mandíbula. Si es así deberás recortarlos.
- A continuación sumerge el protector en el agua hirviendo durante 30 segundos.
- Si tu protector bucal no lleva tira para manejarlo tendrás que sacarlo con una cuchara y ponerlo rápidamente en el agua fría durante 1 o 2 segundos. Acto seguido coges el protector y te lo metes en la boca.
- Entonces debes morderlo un poco, presionando con los dedos en los dientes y en las encías para ajustarlo lo mejor posible.
- Cuando tengamos la forma moldeada lo dejamos unos segundos más en el agua fría y ya podremos secarlo.
- Nos lo volvemos a probar y si vemos que no ajusta bien, repetimos el proceso.